1. El Secreto que Nadie Revela: Quieres aprender sastrería profesional, pero los maestros sastres guardan sus técnicas bajo llave, o las academias presenciales son excesivamente caras y no se ajustan a tu tiempo.

2. El Reto de Vestir con Clase: Necesitas un traje elegante y a medida para el trabajo o eventos, pero es imposible encontrar uno que te ajuste perfectamente sin invertir una fortuna en tiendas de alta costura.

3. Costura Lenta y sin Precisión: Amas coser, pero tus prendas se ven "hechas en casa". Te falta esa precisión en el corte y planchado final que solo la sastrería profesional puede darte.

4. Frustración Digital: Has pasado horas en YouTube buscando videos y tutoriales, solo para encontrar información fragmentada, incompleta o maestros que se saltan los pasos clave (como el planchado de estructura o el trazo exacto).

5. El Costo del Intento: Cada vez que intentas replicar un tutorial fallido, pierdes tiempo y tela valiosa, sintiendo que la sastrería profesional es un arte inalcanzable.

Tu deseo es simple: usar y vender prendas con un acabado de boutique y una caída impecable. Pero hasta ahora, el camino ha estado lleno de obstáculos.